Ubicado en la esquina de Sixto Fernández y España, se levanta y ofrece sus servicios este restaurant. La Bernardita posee dos amplios salones. El principal, ubicado en la planta baja, muestra una amplia decoración campestre en sus paredes: armas, fustas, estribos, espuelas, cuadros, vinos y una generosa parrilla a la vista. En tanto, el salón ubicado en el primer piso es austero en su decoración, aunque no por eso menos agradable.
Ahora bien, en cuanto a sus platos, la parrillada que ofrece a sus comensales es abundante y generosa. Dividido en dos tandas, en primer lugar las achuras-mollejas, chinchulines, riñón, chorizo y morcilla- cocinadas en su punto justo. La carne –vacío y asado en tira- resulta también abundante con especial mención al vacío, tierno, sabroso y jugoso.
Además de la carne –también ofrece platos elaborados en base a lomos y matambres- en la carta se destacan sus pastas y una abundante opción de salsas para acompañar; así como pescados.
Su bodega es variada- ofrece clásicos y de moda- y la atención de las mozas, sobria.
En fin, si el deseo es disfrutar de las bondades de la carne, La Bernardita es una buena opción.
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